URGENCIAS

La posibilidad de una urgencia está siempre presente y conviene tener claro a dónde acudir en según qué casos. Las urgencias raramente respetan nuestra agenda y cuando se presentan es muy común preguntarse qué hacer, sobretodo cuando necesitamos ayuda rápidamente.

La importancia de un buen servicio de urgencias puede marcar la diferencia drásticamente  en el devenir de la afección. Un mal servicio puede ser, como dice el refrán, pero que la misma enfermedad y ocasionar problemas futuros y complicaciones. Lo mejor es siempre saber diferenciar en qué caso conviene ir al hospital o a una clínica, y en este último caso, contar con tu clínica de confianza. No hace falta que escondamos que estamos aquí para que cuentes con nosotros.

Dicho esto, ¿qué hacemos cuando se presenta  una urgencia?  Si se trata de dolor claramente localizado como consecuencia de un diente (caries, flemones, etc.), si se te ha  caído  un diente o bien se te ha roto total o pacialmente, en cualquiera de estos tres casos, llámanos sin dudarlo. Fuera de estos tres casos, lo mejor es siempre que acudas a un hospital. Es preferible que del hospital te manden a que te veamos a lo contrario.

Pongamos  un  ejemplo. Estás practicando deporte  y  de un golpe te fracturas un diente. O bien de repente empiezas a sentir un dolor muy agudo en una muela que ya indica que no vas  a  poder soportar toda la noche. En ese momento, busca nuestro contacto y llámanos inmediatamente, no importa la hora. Por teléfono te haremos  una primera valoración, mediante algunas preguntas trataremos de averiguar el origen y/o el alcance del problema, y si interpretamos que es necesario intervenir inmediatamente, te pediremos que  vengas a la clínica. Ya  en persona trabajaremos a fondo para restablecer tu tranquilidad y optar por el tratamiento (o inmediato o más a medio plazo) más indicado. En caso de que hiciera falta también  te daremos instrucciones vía  telefónica. Siguiendo con el ejemplo, si se te ha partido un diente, te  daremos instrucciones precisas sobre cómo proceder para llegar  a la clínica en las mejores condiciones de cara a tu  recuperación. Ocurre lo mismo  cuando alguien sufre una mordida severa, es importante  saber tratar inmediatamente la herida antes de  llegar a la clínica.

Muchas veces nos contactan por empastes desprendidos, sobretodo cuando son antiguos y no se encuentran en buen estado. Es otro ejemplo de que cuanto antes  puedas disfrutar de atención médica, mejor. La exposición a las bacterias tras el  desprendimiento de un empaste puede generar complicaciones que atenten contra la vida del propio diente.

Si usas brackets y algo se  te ha roto, ¡ni lo pienses! Vente en cuanto puedas. O si hace  poco que te has  sometido a una operación de implantes y  sientes un dolor inesperado y  preocupante, llámanos igualmente.

Como ves, existen numerosos casos que pueden precisar atención de urgencias en tu clínica de confianza, y queremos estar seguros de que sabes que en DENTAL ARGEME contamos con todo lo necesario  para ofrecerte un servicio de urgencias impecable a cualquier hora. ¡Apunta nuestro contacto porque nunca se sabe!

CORONAS DENTALES, UN TRATAMIENTO CONSOLIDADO

Las coronas dentales son básicamente piezas de, por lo general, porcelana o circonio que se colocan en la superficie de los dientes y que nos ayudan a recuperar tanto su funcionalidad como su estética. En la actualidad son un tratamiento consolidado por su altísimo índice de éxito y satisfacción en los pacientes, sin embargo hay que  tener en cuenta que no son algo que una vez aplicado vaya a durarnos toda la vida.

Lo primero de todo, conviene tener en cuenta que cuando sufrimos el deterioro o la rotura de un diente, hasta las acciones más cotidianas como sonreír o masticar pueden convertirse en causas de verdadero sufrimiento. Es aquí donde las coronas ofrecen una excelente solución. Se considera que las coronas bien cuidadas pueden durar entre 15 y 18 años. Este tiempo puede oscilar en función de los hábitos del paciente, del uso que se haga de ellas (es decir, no andar mordiendo cosas indebidas que puedan romperlas), de que logremos mantener a raya las consecuencias del bruxismo con el uso de una férula de descarga nocturna, del cuidado que pongamos en realizar revisiones periódicas, y de mantener una buena higiene.

Las coronas, al ser de porcelana, nunca cambiarán su tonalidad, de forma que con el paso de los años no notaremos que se tiñan de amarillo como sí lo hacen, por ejemplo, los dientes naturales.

Otra cualidad de las coronas es que son muy resistentes. Sin embargo ello no implica que en un momento dado, debido sobretodo a malos hábitos, se pudieran descementar y caer. No es habitual pero es posible, en cuyo caso lo único que hay que hacer es volver a visitarnos para comprobar que todo sigue en perfecto estado y volver a cementarlas en su sitio sin más problema. 

En definitiva, las coronas son actualmente uno de los tratamientos esenciales para la recuperación de piezas dentales rotas o desgastadas. Si has notado que tienes un diente estropeado y crees que una corona podría resolver tu problema, no dudes en venir a visitarnos. Valoraremos todas las opciones y nuestras profesionales te indicarán en mejor tratamiento a seguir según tu caso. Además, la primera visita es gratuita. ¿Por qué no te pasas a que te echemos un vistazo?

¿CREES QUE TU ENCÍA TIENE MUCHA VISIBILIDAD CUANDO SONRÍES?

El prognatismo de la encía no es  un problema en sí mismo pero sí resulta estéticamente menos deseable que las sonrisas donde la encía guarda una proporción de visibilidad más acorde a lo que solemos ver en los medios.

La también llamada sonrisa gingival –en la que la encía tiene más presencia que los dientes– está provocada por varios factores y se puede tratar para lograr que el paciente pueda disfrutar de una sonrisa más despejada.

En resumidas cuentas, esto se puede deber a que el paciente tenga un labio superior demasiado corto, un maxilar largo, una posición dental baja, un excesivo desgaste oclsusal o lo que llamamos una erupción pasiva alterada, es decir cuando la natural aparición de los dientes ha sido interrumpida por alguna razón y los dientes no han terminado de salir.

Muchas veces tendemos a denostar la cuestiones puramente estéticas al no considerarlas problemas de salud, sin embargo conviene recordar que un rasgo estético extremo indeseado puede fácilmente llevar a algunos pacientes a problemas de auto cofianza y autoestima. ¿Cuánta importancia le damos al aspecto de nuestra sonrisa, de nuestros labios, de nuestros dientes? es una cuestión muy subjetiva.

Según los estándares odontológicos, en mujeres se considera normal enseñar hasta tres o cuatro milímetros de encía y en hombres como mucho hasta dos milímetros. Más allá de eso, en términos homogéneos, solemos hablar de sonrisa gingival.

La sonrisa gingival tampoco provoca ningún tipo de patología. Se puede tener sonrisa gingival y disfrutar de una excelente salud bucodental. Tan solo podemos empezar a pensar en algún problema si la encía visible supera los ocho milímetros. Otra cosa es cuando la sonrisa gingival va a asociada a algún tipo de alteración en la mordida, lo que entonces sí sería objeto de estudio para detectar posibles desequilibrios que puedan desembocar en descastes a otros niveles.

Los tratamientos para rectificar la sonrisa gingival son la gingivectomía, es decir, el recorte de a encía a la altura del nacimiento del diente; el alargamiento de coronas o la colocación de carillas dentales de porcelana. Dependiendo de las características del paciente se puede optar por unos u otros tratamientos.

Si sospechas que tu sonrisa podría resultar más estética debido a la cantidad de encía que muestras, te invitamos a que pases a visitarnos. Podemos hablar de ello, hacer una valoración profesional y estudiar las diferentes opciones. Estaremos encantados de ver cómo podemos mejorar tu sonrisa. Además la primera visita es gratuita. ¡Te esperamos!