El síndrome de la boca ardiente es una alteración sensorial que experimentan algunas personas a través de pinchazos, dolor, quemazón y ardor o picor en la cavidad bucal, especialmente en la lengua. El paladar, las encías, los labios o la orofaringe se pueden ver también afectados por esta patología llamada estomatodinia cuando las molestias persisten en el tiempo. Entonces pueden aparecer otros síntomas como la sequedad bucal al reducirse la secreción de las glándulas salivales, o la alteración en el sentido del gusto y un cambio de coloración en la lengua que se torna más blanca o roja, debido a un proceso inflamatorio o irrritativo.

Todos estos síntomas pueden variar en intensidad a lo largo del día, siendo más leves durante la noche.

¿Cuáles son sus causas?

• Problemas de origen odontológico: como la punta de un diente que incide sobre la mucosa, una gingivitis, la pérdida de un empaste, una mala oclusión o una excesiva presión de una prótesis dental removible mal colocada o ajustada. En estos casos se puede manifestar con enrojecimiento e inflamación de la mucosa, ocasionalmente un ligero sangrado y la consabida sensación de picor, escozor o ardor.
• La menopausia u otros cambios hormonales.
• Patologías de diverso índole como el síndrome de Sjögren, las infecciones bacterianas o por hongos, diabetes tipo 2, las afecciones de las glándulas salivales, alergias alimentarias, reflujo gastroesofágico, patologías hematológicas, etc.
• Nuestra alimentación. Los alimentos que consumimos influyen en la salud de nuestra boca. Por ello la deficiencia de algunos nutrientes puede provocar el desarrollo de esta patología. Concretamente, la falta de vitamina B y de minerales como el hierro y el zinc pueden afectar a la salud de los tejidos bucales.
• Ciertos medicamentos y algunos tratamientos, como la radioterapia, pueden ocasionar el picor o la sensación de ardor en la boca.
• El consumo de tabaco puede conducir a una alteración en el sentido del gusto, picor en la lengua o la sensación de entumecimiento.
• Padecer estrés psicológico puede generar pérdida de sensibilidad de la mucosa y sensación de ardor en la lengua.

El tratamiento aconsejado para esta patología depende totalmente del factor que la ocasiona. Por ello, si observas los síntomas arriba mencionados, ven a vernos y podremos realizar un análisis para descartar o tratar posibles problemas odontológicos subyacentes.