¿FUMAS? ESTO TE INTERESA

Si eres fumador crónico probablemente tengas asumido que hay un montón de aspectos relacionados con tu salud que se van a ir deteriorando. No es por meter presión. Sabemos que no es fácil soltar el hábito. No obstante nos encontramos en la obligación de informar de los efectos perjudiciales que tiene el tabaco sobre la salud oral para contribuir tanto a la prevención de enfermedades como a evitar que el tabaquismo siga ganando terreno.

El estado de tu salud en general y oral en particular está directamente relacionado con la cantidad de cigarrillos que fumas diariamente. Alguien que fuma mucho es mucho más propenso a sufrir enfermedades en las encías, tinción de dientes y lengua, un progresivo deterioro del aspecto de sus sonrisa, mayores dificultades a la hora de corregir problemas dentales, también mayores tiempos de curación tras cirugías dentales, pérdida progresiva del olfato y del gusto, y lamentablemente, cáncer oral.

el tabaco mancha los dientes, los vuelve amarillentos y hasta marrones, y esas manchas no son fáciles de eliminar. Requiere limpiezas regulares, blanqueamientos y a la larga probablemente tratamientos con carillas dentales. Sin embargo, no hay nada que vaya a perdurar si el hábito persiste. Todo será en vano.

Una persona fumadora multiplica por cinco las probabilidades de padecer algún tipo de cáncer oral o lesiones precancerígenas. Piensa que el tabaco es el principal responsable del cáncer en el labio, en la encía, en la lengua, la boca y la garganta. No hace falta especificar los efectos del cáncer.

Si el cáncer nos parece una meta lejana, también conviene saber que las heridas simples de la boca cicatrizan mucho peor y por lo tanto están más expuestas a dolorosas infecciones. En caso de que en algún momento fuese necesaria una cirugía (una extracción o un implante, por ejemplo), los tiempos de recuperación y las probabilidades de infección también van a multiplicarse.

El tabaco causa sarro. El sarro aparece en la base del diente, lo reconocerás por esas placas negras que se entienden y que son imposibles de quitar por tus propios medios. Despacio pero con toda seguridad el sarro va descomponiendo el diente hasta afectar a la sujeción de este y pone en riesgo los dientes en sí pudiendo causar la pérdida de piezas. Una vez más, el sarro puede ser eliminado pero si el tabaquismo persiste, el sarro volverá. reproducirse.

Dejar de fumar es posible, y es realmente sano. Si quieres conocer el estado actual de tu salud oral, nos gustaría invitarte a que te pasaras por la clínica a que te hagamos un chequeo en profundidad. La primera visita es completamente gratuita y quizás encuentres las razones que necesitas para animarte a dejarlo definitivamente.

Recuerda que nos encanta verte sonreir ;-)